Si la periodontitis altera la salud general del cuerpo, como ya lo han confirmado diferentes estudios sobre la diabetes y el sistema cardiovascular, no es descabellado que el padecimiento de esta enfermedad afecte el rendimiento de atletas.
La relación de la periodontitis con estas enfermedades viene dada por alteraciones de la disponibilidad de nutrientes y de la respiración celular. En caso de agudización de enfermedad pulmonar obstructiva crónica, se cree en la posibilidad de que la periodontitis pueda también afectar a la función respiratoria, al menos en pacientes con problemas crónicos.
Estos hechos hacen pensar a los científicos sobre una relación más directa entre la periodontitis y el rendimiento físico, aunque la información e investigaciones en esta materia son escasas.
Hay un par de estudios que se acercan al problema: El primero (de Oliveira y otros, titulado “Periodontal disease as a risk indicator for poor physical fi tness: a cross-sectional observational study”, de 2015), en el que se demuestra que la gravedad de la periodontitis se relaciona directamente con la reducción de la fuerza muscular en flexiones de brazos, flexiones abdominales y carrera en varones.
Y el segundo (de Eberhard J., titulado “Moderate and severe periodontitis are independent risk factors associated with low cardiorespiratory fi tness in sedentary non-smoking men aged between 45 and 65 years”, de 2014) encontró que la periodontitis moderada y severa se relacionaba con reducción de la capacidad cardiorespiratoria en varones de entre 45 y 65 años sedentarios.
Una de las conclusiones que arrojan estas investigaciones y de las que echa mano la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA), en un informe sobre el tema, es que la actividad física es una excelente medida preventiva para que la periodontitis no afecte los sistemas cardiovascular y respiratorio.
Pero más cerca de los deportistas, un equipo inglés del Eastman Dental Hospital hizo aportes más convincentes. Así, un estudio en el que involucraron atletas olímpicos, jugadores de baloncesto y futbolistas evidenció que, al contrario de lo que se esperaba, la salud oral de los atletas es pobre. Hallaron traumatismos dentarios, caries, enfermedad periodontal, erosiones dentales e impacto de muelas del juicio e inflamación alrededor.
Y los números demuestran que 15% de ellos padecían periodontitis irreversible y 76% gingivitis. Además, 8% indicó que los problemas bucales afectaban a sus entrenamientos y 5% que lo hacía sobre su rendimiento deportivo.
Los investigadores evidenciaron relación entre el estado bucal y el número de lesiones de ligamentos, tendones y huesos.
Estos resultados hacen un llamado al Comité Olímpico Internacional (COI) para que vele por una mejor salud bucal de los deportistas, tan importante como la del resto del cuerpo del atleta.
Hubo un caso, en el que los problemas dentales terminaron con la carrera de un futbolista, o al menos no pudo concretar su ascensión. Se trata de Cissokho, quien perdió su fichaje por el Milán italiano cuando el club descubrió que sufría de maloclusión, una malformación en su dentadura.
La maloclusión podría provocar que el jugador se cansase más de lo debido y además podía sufrir una lesión con mayor facilidad. Esta decisión del Milán es un pequeño aporte al despertar del mundo deportivo, que poco a poco le está dando más importancia a la salud bucal de los atletas. En Argentina, por ejemplo, los clubes de fútbol han incorporado a un odontólogo en su equipo médico.
Las evidencias de que la enfermedad periodontal afecta la salud general del cuerpo y, por ende, el rendimiento físico y deportivos, con lesiones articulares y musculares son suficientes para articular mayor prevención.
Por ello, en Clínica Dental Pilar Garrido hay un equipo especializado en prevención y tratamiento temprano de gingivitis y periodontitis, para evitar problemas en el futuro que puedan afectar la carrera de un gran deportista.